LA ARAÑA
A veces que un proyecto, una idea, o trabajo de cualquier disciplina se presente abalado por un nombre conocido, relevante, y aclamado en su género pues le da prestigio, y uno se anima y casi obliga a ir a ver el último invento del momento. Y como es en este caso, en la Casa Vinçon exponían una instalación luminosa diseñada por Jean Nouvel, y para allá que me fui. Pues bien, resulta que con ese extraño objeto colgado del techo me tenia que emocionar, sentirme libre y no se que cosas mas. Y lo único que pensé fue en que los de seguridad en el trabajo y el tío de la ISO no aprobarían para nada todos esos cables colgando, y esas luces desnudas para un puesto cómodo para el trabajador. Lo siento pero esta vez aunque me hayan disfrazado el producto de arte, no me han convencido.