FUERTEVENTURA PARTE I
28 ABRIL 2007
Son las 3 de la madrugada y ya estoy en pie, maldigo el día que compré los vuelos de primera hora, pero la expectativa de irme de vacaciones puede con mi mal humor mañanero. Mi padre se ofrece para acompañarme hasta el coche, no se de donde ha sacado ese nuevo afán de protección a mis casi 30 años, estoy asombrada. Por otro lado, mi madre desde la cama todavía me esta preguntando donde voy…serán cosas de la edad o es que nadie me hace caso en esta casa.
Recojo a mi amiga y llegamos sin problemas al aeropuerto de Gerona, dejamos mi coche en el parking cubierto y vigilado. Es la hora de la facturación y Ryanair nos dice que no hemos comprado el derecho a llevar maleta, así que nos hacen pagar un importe extra, me cabreo porque me viene de gusto, no porque tenga razón, porque al parecer en su pagina web lo pone claramente y los ampara yo que se que ley. Subimos a la cafetería del aeropuerto y nos atiende un señor pakistaní que solo se defiende en un ingles chapucero, para que viajar más. Llegamos ya a la puerta anunciada y la gente nerviosa forma la cola, y la desforma un par de veces, y veo y oigo al típico pijo que se queja de la gentuza que no sabe comportarse y que si la muchedumbre que usa las compañías de bajo coste…etc…, pero donde vas pijo mierda si te he visto antes poniéndote cremitas de gratis en el “duty free”, y es que le hubiera girado la cara pero con tanto potingue me hubiera patinado la mano. Nosotras que tenemos estilo esperamos y embarcamos las últimas, para que correr, si todos cabemos, por suerte nos podemos sentar juntas con el pasillo por separación, charlamos e intentamos dormir. ¿Dormir? ¿Quien dijo dormir ? Imposible con los paseitos de la “cabin crew” de Ryanair, y es que los chavales van a comisión por ventas y se lían a pasearse y venderte hasta su madre. Primero pasan con el carrito de bebidas y snacks varios, mas tarde sigue el desfile con los perfumes y productos sin tasas, y ya mas tarde pasan a recoger la basura y botes vacíos, y mucho, pero que mucho mas tarde la feria de la compra y venta sigue y te intentan endosar unos boletos tipo lotería casera diciendo que si te toca te sentirás mas cerca de la “jet set”…por Dios quiero dormir, hacedme el favor de apagar la luz, dejad de pasearos YA, coño. Ya no puedo dormir, quiero decir dormir algo, ya paso, que mas da, me concentro en la pareja cuarentona que tengo a mi lado, por Dios, que conversación…que se puede dividir en 3 momentazos dirigidos por el marido, y los vamos a titular: “- Asun, vamos a adivinar que forma tiene la tierra”, ese momento es cuando mirando por la ventana y mirando la forma de la costa juegan a adivinar si es Gibraltar o Andalucía, el otro momento seria el de: “- Asun, saca el bocata y la cerveza”, ese momentazo es cuando sacan el bocata de chope y la birra y dejan un olor embriagador en el aire, y en ese momento solo deseo que vuelvan a pasar con el carrito de perfumes. Y el último pero no menos gracioso es cuando suelta la frase: “- Asun, coño nos han timado 1 hora, faltan 2”, este momento se vive cuando el marido en cuestión se da cuenta que una vez lleguemos a Canarias se debe atrasar la hora y el tipo se descoloca y se siente timado, mínimo por Cronos y luego ya veremos.
Por fin tomamos tierra en un aeropuerto de lo más singular, al ladito de la playa, recogemos el coche de alquiler en Avis que nos asigna un Clio plateado muy majo. Lo primero que vemos al incorporarnos a la carretera es un paisaje desolado casi lunar con montañas prácticamente peladas de vegetación natural, pero curiosamente les han crecido unos bosquecillos de grúas, que impacto, que tristeza, sobre eso hablare mas tarde. Mi amiga es la que conduce y ve rápidamente un mercadillo y claro teniendo ella el volante cualquiera le dice que no paramos, son tenderetes repletos de bolsos, joyas, relojes y perfumes de imitación de grandes marcas, se nos van los ojos y al final una simpática nigeriana nos vende un perfume a cada una, de los cuales mas tarde nos damos cuenta que son mas falsos que los ojos de espinete y encima uno de los frascos lleva incorporado un mosquito que nada en “J’adore de Dior”, acabaron los 3 en la basura, el “Dior”, el “Carolina Herrera” y el mosquito, nuestra primera timada.
Tomamos rumbo al sur por la costa hasta llegar a Costa Calma donde sabemos que esta el hotel, pero nos perdemos entre tanta urbanización, y como que no tenemos vergüenza en preguntar, nos guía un señor muy servicial con su furgoneta hasta la puerta, y os aseguro hermanos que nadie lo hubiera encontrado. Nos alojamos en el Hotel Drago Park y entre la entrada, deshacer la maleta, colocar los trapitos y demás, llega la hora de comer, nos acercamos al restaurante y vemos servida en buffet una comida pasada, fría y asquerosa y empezamos a despotricar del cocinero, su madre y cuando ya estamos a punto de colgar a la camarera, nos damos cuenta que son las 12 y no las 13 como creíamos porque ninguna de las 2 había cambiado la hora, por lo que nos estábamos comiendo el snack servido a las 10 de la mañana. Para olvidar las penas nos vamos al bar y nos tomamos nuestro primer cocktail de nuestras vacaciones, luego nos tumbamos en las hamacas de la piscina y nos quedamos traspuestas al sol unos 20 minutos y ahí es donde mi amiga pilla una insolación de cuidado, no me preguntéis porque pero yo salgo casi ilesa excepto por mis empeines.
La Isla de Canarias de Fuerteventura, la antigua Maxorata, destaca por ser la más virgen y despoblada del archipiélago, además de la más árida y seca, pero en su litoral se encuentran las payas más bellas y solitarias de Europa. Alrededor de 100 kilómetros la separan del continente africano, de ese Sahara de blancas arenas y oníricas panorámicas. La isla de Fuerteventura con sus 1.640 km2 representa la segunda en extensión del archipiélago canario, depende donde este la marea. Goza de unas costas bajas, muchas playas y terrazas arenas calizas en las que soplan vientos del noreste y del norte durante el otoño que son suaves, pero algo mas fuertes en primavera y verano. Se considera Fuerteventura, la cuarta región natural a nivel mundial, territorio en el que viven plantas que datan de la era terciaria y que solo se conservan en esta isla por haber desaparecido del resto del planeta. De todas formas hay que tener en cuenta que la población vegetal es principalmente el matorral espinoso que se extiende por sus lomas.
Así que después de esta pequeña descripción, llega la hora de empezar a descubrir la Isla, y nos vamos mas al sur, todo al sur, al final del sur, al pico en forma de “J” que es el Parque Natural de Jandia, con sus 14.318 ha constituye el 9% del total de la superficie de toda esta ínsula. Allí, casi en el final del mundo y después d recorrer un camino prácticamente sin asfaltar, encontramos un hermoso faro con visitas al Pedregal del Llano del Cotillo, en una zona de arrecifes con preciosos panoramas, donde la naturaleza reina a sus anchas. Mas tarde nos dirigimos a Punta Jandia y deambulamos por su paseo marítimo mientras entramos en las tiendas y admiramos el otro faro alto, esbelto, blanco y solitario en la playa, al no ser por el esqueleto de una ballena que vino a morir hace muchos años a estas maravillosas costas, que lo acompaña.
Ya vamos de retirada, lo poco que hemos visto nos ha sorprendido y nos quedamos con ganas de seguir buscando lugares recónditos, sabemos que la Isla todavía oculta numerosos tesoros y los encontraremos.
En el hotel cenamos sin pena ni gloria, por favor, que pongan al cocinero a pintar paredes por el bien de los comensales, si queréis mas información mirad el apartado del hotel. El complejo esta lleno de alemanes, que pasa, que Alemania esta vacía, o que…con mi amiga tenemos tema de conversión para rato en poner verdes a las 3 o 4 “parrots” rojas como tomates, vestidas como fulanas y chillonas como cotorras que revolotean en busca de carne, como aves carroñeras, y que invaden el bar. Pues si este es nuestro segundo cocktail del día y de nuestra estancia, nada mejor que el alcohol para olvidar el mosquito, el snack, las “parrots” y dormir a pierna suelta.
Recojo a mi amiga y llegamos sin problemas al aeropuerto de Gerona, dejamos mi coche en el parking cubierto y vigilado. Es la hora de la facturación y Ryanair nos dice que no hemos comprado el derecho a llevar maleta, así que nos hacen pagar un importe extra, me cabreo porque me viene de gusto, no porque tenga razón, porque al parecer en su pagina web lo pone claramente y los ampara yo que se que ley. Subimos a la cafetería del aeropuerto y nos atiende un señor pakistaní que solo se defiende en un ingles chapucero, para que viajar más. Llegamos ya a la puerta anunciada y la gente nerviosa forma la cola, y la desforma un par de veces, y veo y oigo al típico pijo que se queja de la gentuza que no sabe comportarse y que si la muchedumbre que usa las compañías de bajo coste…etc…, pero donde vas pijo mierda si te he visto antes poniéndote cremitas de gratis en el “duty free”, y es que le hubiera girado la cara pero con tanto potingue me hubiera patinado la mano. Nosotras que tenemos estilo esperamos y embarcamos las últimas, para que correr, si todos cabemos, por suerte nos podemos sentar juntas con el pasillo por separación, charlamos e intentamos dormir. ¿Dormir? ¿Quien dijo dormir ? Imposible con los paseitos de la “cabin crew” de Ryanair, y es que los chavales van a comisión por ventas y se lían a pasearse y venderte hasta su madre. Primero pasan con el carrito de bebidas y snacks varios, mas tarde sigue el desfile con los perfumes y productos sin tasas, y ya mas tarde pasan a recoger la basura y botes vacíos, y mucho, pero que mucho mas tarde la feria de la compra y venta sigue y te intentan endosar unos boletos tipo lotería casera diciendo que si te toca te sentirás mas cerca de la “jet set”…por Dios quiero dormir, hacedme el favor de apagar la luz, dejad de pasearos YA, coño. Ya no puedo dormir, quiero decir dormir algo, ya paso, que mas da, me concentro en la pareja cuarentona que tengo a mi lado, por Dios, que conversación…que se puede dividir en 3 momentazos dirigidos por el marido, y los vamos a titular: “- Asun, vamos a adivinar que forma tiene la tierra”, ese momento es cuando mirando por la ventana y mirando la forma de la costa juegan a adivinar si es Gibraltar o Andalucía, el otro momento seria el de: “- Asun, saca el bocata y la cerveza”, ese momentazo es cuando sacan el bocata de chope y la birra y dejan un olor embriagador en el aire, y en ese momento solo deseo que vuelvan a pasar con el carrito de perfumes. Y el último pero no menos gracioso es cuando suelta la frase: “- Asun, coño nos han timado 1 hora, faltan 2”, este momento se vive cuando el marido en cuestión se da cuenta que una vez lleguemos a Canarias se debe atrasar la hora y el tipo se descoloca y se siente timado, mínimo por Cronos y luego ya veremos.
Por fin tomamos tierra en un aeropuerto de lo más singular, al ladito de la playa, recogemos el coche de alquiler en Avis que nos asigna un Clio plateado muy majo. Lo primero que vemos al incorporarnos a la carretera es un paisaje desolado casi lunar con montañas prácticamente peladas de vegetación natural, pero curiosamente les han crecido unos bosquecillos de grúas, que impacto, que tristeza, sobre eso hablare mas tarde. Mi amiga es la que conduce y ve rápidamente un mercadillo y claro teniendo ella el volante cualquiera le dice que no paramos, son tenderetes repletos de bolsos, joyas, relojes y perfumes de imitación de grandes marcas, se nos van los ojos y al final una simpática nigeriana nos vende un perfume a cada una, de los cuales mas tarde nos damos cuenta que son mas falsos que los ojos de espinete y encima uno de los frascos lleva incorporado un mosquito que nada en “J’adore de Dior”, acabaron los 3 en la basura, el “Dior”, el “Carolina Herrera” y el mosquito, nuestra primera timada.
Tomamos rumbo al sur por la costa hasta llegar a Costa Calma donde sabemos que esta el hotel, pero nos perdemos entre tanta urbanización, y como que no tenemos vergüenza en preguntar, nos guía un señor muy servicial con su furgoneta hasta la puerta, y os aseguro hermanos que nadie lo hubiera encontrado. Nos alojamos en el Hotel Drago Park y entre la entrada, deshacer la maleta, colocar los trapitos y demás, llega la hora de comer, nos acercamos al restaurante y vemos servida en buffet una comida pasada, fría y asquerosa y empezamos a despotricar del cocinero, su madre y cuando ya estamos a punto de colgar a la camarera, nos damos cuenta que son las 12 y no las 13 como creíamos porque ninguna de las 2 había cambiado la hora, por lo que nos estábamos comiendo el snack servido a las 10 de la mañana. Para olvidar las penas nos vamos al bar y nos tomamos nuestro primer cocktail de nuestras vacaciones, luego nos tumbamos en las hamacas de la piscina y nos quedamos traspuestas al sol unos 20 minutos y ahí es donde mi amiga pilla una insolación de cuidado, no me preguntéis porque pero yo salgo casi ilesa excepto por mis empeines.
La Isla de Canarias de Fuerteventura, la antigua Maxorata, destaca por ser la más virgen y despoblada del archipiélago, además de la más árida y seca, pero en su litoral se encuentran las payas más bellas y solitarias de Europa. Alrededor de 100 kilómetros la separan del continente africano, de ese Sahara de blancas arenas y oníricas panorámicas. La isla de Fuerteventura con sus 1.640 km2 representa la segunda en extensión del archipiélago canario, depende donde este la marea. Goza de unas costas bajas, muchas playas y terrazas arenas calizas en las que soplan vientos del noreste y del norte durante el otoño que son suaves, pero algo mas fuertes en primavera y verano. Se considera Fuerteventura, la cuarta región natural a nivel mundial, territorio en el que viven plantas que datan de la era terciaria y que solo se conservan en esta isla por haber desaparecido del resto del planeta. De todas formas hay que tener en cuenta que la población vegetal es principalmente el matorral espinoso que se extiende por sus lomas.
Así que después de esta pequeña descripción, llega la hora de empezar a descubrir la Isla, y nos vamos mas al sur, todo al sur, al final del sur, al pico en forma de “J” que es el Parque Natural de Jandia, con sus 14.318 ha constituye el 9% del total de la superficie de toda esta ínsula. Allí, casi en el final del mundo y después d recorrer un camino prácticamente sin asfaltar, encontramos un hermoso faro con visitas al Pedregal del Llano del Cotillo, en una zona de arrecifes con preciosos panoramas, donde la naturaleza reina a sus anchas. Mas tarde nos dirigimos a Punta Jandia y deambulamos por su paseo marítimo mientras entramos en las tiendas y admiramos el otro faro alto, esbelto, blanco y solitario en la playa, al no ser por el esqueleto de una ballena que vino a morir hace muchos años a estas maravillosas costas, que lo acompaña.
Ya vamos de retirada, lo poco que hemos visto nos ha sorprendido y nos quedamos con ganas de seguir buscando lugares recónditos, sabemos que la Isla todavía oculta numerosos tesoros y los encontraremos.
En el hotel cenamos sin pena ni gloria, por favor, que pongan al cocinero a pintar paredes por el bien de los comensales, si queréis mas información mirad el apartado del hotel. El complejo esta lleno de alemanes, que pasa, que Alemania esta vacía, o que…con mi amiga tenemos tema de conversión para rato en poner verdes a las 3 o 4 “parrots” rojas como tomates, vestidas como fulanas y chillonas como cotorras que revolotean en busca de carne, como aves carroñeras, y que invaden el bar. Pues si este es nuestro segundo cocktail del día y de nuestra estancia, nada mejor que el alcohol para olvidar el mosquito, el snack, las “parrots” y dormir a pierna suelta.
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